martes, 28 de abril de 2015

La novia vendida








Los matrimonios entre afines escogidos por los padres permiten a las familias mantenerse fuertes y dignas generación tras generación. Sólo los yankees y los criados se casan por amor, ya que eso no es lo verdaderamente importante


Gerald O´Hara (Lo que el viento se llevó)


Los doce robles. Solar de los Wilkes.


Es incuestionable que el matrimonio por amor es algo muy reciente y que durante siglos el vínculo conyugal funcionó como un pacto socio-económico ligado al mantenimiento y acrecentamiento de la propiedad de la tierra.
Las bodas se concertaban entre terratenientes, e incluso, entre pequeños campesinos, absolutamente al márgen de los sentimientos,  pues su principal objetivo era establecer un vínculo que permitiera aumentar la importancia, el poder y la riqueza de una entidad social.
Esta realidad, muy bien reflejada en la ópera " Prodaná nevéste", traducida como La novia vendida - mejor la novia trocada- trata de los intereses en el casamiento frente al amor de dos jóvenes.
La búsqueda de mujeres para el casamiento y el precio pagado por ellas aparece ya en los antiguos escritos bíblicos del Génesis,  el Éxodo, y el Deuteronomio con abundantes ejemplos de precios e incluso trabajos de años para la familia de la futura esposa.


Fue la mujer de Isaac, hijo de Abraham, quien mandó a su criado Eliécer hasta tierras de Mesopotamia para encontrar a la mujer de su hijo Isaac. 

Explica el antropólogo británico Jack Goody que la tecnología agraria se encuentra en la base de las razones económicas que vienen a hacernos entender los sistemas de matrimonio y trasmisión de la herencia en sus dos modalidades, el del matrimonio con dote y el de la compra de la novia.
Cuando el trabajo del campo  es itinerante, las parcelas son pequeñas y no existe presión poblacional, el trabajo descansa sobre la mujer y los hijos, predominando la búsqueda de esposa fuera de la comunidad, la poligamia y la compra de la novia, siendo lo importante que el pago por la esposa compensa la pérdida de una hija como productora. En estos casos la mujer no trasmite herencia y el clan, tribu o linaje mantiene sus propiedades.
El dinero o riquezas invertidos por la familia del varón sirve, a su vez, para que la familia de la novia pueda comprar mujeres para los hijos varones.
Del otro lado se encuentran los sistemas de dote, asociados a una agricultura de arado que permite cultivar parcelas mas extensas, sostener poblaciones mas densas, aumentar la productividad y de mano de obra fundamentalmente masculina. El caudal que lleva la mujer cuando se casa (dinero, bienes muebles e inmuebles, tierras...), es la herencia  recibida de sus padres que trasmite a su descendencia. Su objeto es establecer un capital conyugal, con lo aportado por el varón, que asegura a la mujer en caso de divorcio o viudedad. La mujer mantiene su propiedad y esta puede retornar a su familia. 
Esta práctica favorece la celebración de esponsales entre iguales  en sociedades donde se practica la monogamia. Las mujeres son mas que productoras, reproductoras y se convierten en instrumentos de arreglos matrimoniales en sociedades endogámicas entre grupos de terratenientes.
Mantiene Goody que instituciones basadas en la trasmisión de la herencia y el estatus con independencia de su sexo, existieron en la Europa protohistórica a partir de la instalación de una agricultura técnicamente avanzada en la que el arado y el regadío sustituyeron a una agricultura itinerante.
La existencia de modificaciones sustanciales en la tecnología agraria prehistórica europea, fundamentalmente asociadas al uso del arado, el abonado de la tierra y la introducción de algunos tipos de leguminosas que favorecían el aumento de la fertilidad de los suelos, supusieron el abandono de la agricultura itinerante, dando lugar a una mayor estabilidad de las poblaciones. 
Estos cambios se produjeron fundamentalmente en la transición de la Edad del Cobre (Calcolítico) al Bronce cuando comienzan a aparecer poblados permanentes ligados a la revolución de los productos secundarios y, ligados a aquellos una orfebrería y vajilla de oro (en la transición entre el III y II milenio a C) concentrada en la zona centro y norte de Portugal y Galicia. Curiosamente, sus paralelos se hallan en tumbas inglesas y bretonas de idéntica cronología, de lo que cabe deducir la existencia de contactos de circuito atlántico por parte de unas élites.



Tesoro de Caldas de Reis, Pontevedra

En este contexto se entendería el Tesoro de Caldas de Reis, el mas impresionante atesoramiento de oro del Bronce Antiguo de  toda Europa occidental, relacionado con una nueva forma de bebida y adorno personal y que
probablemente, constituye un atesoramiento de materia prima compuesto por vasos, peine y 21 brazaletes que penden de un torques de paletas. 

Un segundo periodo es el paso de la Edad del Bronce al Hierro, cuando el sistema  se ha generalizado y el circuito de intercambios abarca todo el continente europeo, se produce la primera explotación intensiva de la sal, que permite preservar y conservar alimentos y mejorar la cría de ganado, entre otras cuestiones y se produce una renovación del utillaje agrario metálico, lo que supuso asentamientos mas estables, ocupados durante generaciones.


A ambos momentos corresponden periodos de un desarrollo importantísimo de la orfebrería y la emergencia del guerrero asociado al valor del metal como símbolo de poder y a una sociedad patriarcal que se mantendrá ligado a la tierra hasta la revolución industrial.




Tesoro de Villena

El Tesoro de Villena se enmarca en la red de contactos de las élites del centro y el occidente del Mediterráneo con la Península Ibérica en época precolonial. 
Está constituido por once cuencos, tres botellas de oro, dos de plata, veintiocho brazaletes, piezas de revestimiento, dos apliques de hierro, embutidos en oro y ámbar, considerado de propiedad de un individuo masculino.


Torques de Sagrajas, Badajoz.

Otras excepcionales piezas, que responderían al mismo concepto, son el torques de Sagrajas, que  habría formado parte de un ajuar femenino y posee un pequeño diámetro y una apertura que correspondería al cuello de una mujer joven en edad de contraer matrimonio, a partir de los 12 o 13 años, y las armas de corte atlántico relacionadas con las aguas .



Espadas de la Edad del Bronce del depósito hallado en la Ría de Huelva.



Tesoro de Aliseda, Cáceres


Estas prácticas se conservaron en la Edad del Hierro, dando cuenta de ellas algunas evidencias arqueológicas como el tesoro de Aliseda, que corresponde a un enterramiento localizado en un importante nudo de comunicación que controla el paso entre los valles de Tajo y el Guadiana, en la Sierra de San Pedro, y el camino entre Cáceres y Portugal. Se trata, según Marisa Ruiz-Galvez del enterramiento de una princesa del suroeste casada con un señor local, seguramente en el marco de lazos sociales, políticos y económicos entre jefaturas que permitían la libre circulación entre ambos territorios. Esta  mujer se habría hecho enterrar con el ajuar traído del hogar paterno como símbolo de su rango.
En momentos mucho mas avanzados, princesas iberas se unirán, para establecer alianzas sociales, políticas y económicas, con los caudillos cartagineses Amilcar y Asdrúbal Barca.
El sistema se mantendrá vigente hasta que en el siglo IV d. C., con el triunfo del cristianismo, la Iglesia, comienza a oponerse al matrimonio de conveniencia, las bodas entre primos, y en definitiva, a las estrategias hereditarias existentes, apoyando la familia conyugal, el matrimonio por amor y la libertad de testar en favor de quien se desee contra los intereses de la familia y parientes, favoreciendo las donaciones. Poco a poco, se convirtió en el mayor terrateniente de la Cristiandad, si bien la propia sociedad halló enseguida modos de burlar dichos mandatos religiosos.

¡Que tengan una feliz semana!





La lectura del trabajo Ruiz Gálvez. M.L.; 1992: La novia vendida: orfebrería, herencia y agricultura en la Protohistoria de la Península Ibérica. SPAL, pp 219-251 fue para mi un auténtico placer por el tema, por la forma, por la propuesta...en fin, mi agradecimiento para ella.


martes, 21 de abril de 2015

Eva, la que da la vida.




Sant Sadurní d'Osormort, Osona. El árbol del Bien y del Mal en medio de Eva y Adán. Siglo XII.

No hay preocupación humana sin mitos. Conscientes de la necesidad de explicaciones lógicas adaptadas a los tiempos y medios, los seres humanos seguimos preguntándonos por nuestro origen como especie. 
La Ciencia moderna, mediante el estudio del ADN Mitocondrial (que es el ADN que se hereda por via materna única y exclusivamente) ha venido a afirmar la existencia de un ancestro común que ha pasado a ser conocido como la "Eva Negra o Eva Mitocondrial", de la que se afirma que que aún no siendo ni la primera ni la única de las hembras que han tenido descendencia, es la única que produjo una línea completa de hijas hasta nuestros tiempos, lo que la convierte en el ancestro femenino en el que se sitúa el origen de toda la población humana actual. 
Esta propuesta sostiene el origen del la Humanidad actual en una Eva africana del género sapiens hace unos 200.000 años.
La población generada no salío del continente africano hasta el 50.000 a C, pero una vez que lo hizo colonizó en poco tiempo todo el mundo, hibridándose en Europa, con los neanderthales, de los que conservamos un 2% de nuestro ADN.



Ante esta visión moderna y científica se yerguen otras tradicionales, creacionistas, ligadas a las  escrituras y culturas antiguas. Hace nada, en términos cronológicos absolutos, se sostenía que la creación de la primera mujer se había producido en el jardín del Edén, a partir de una costilla del primer hombre, Adán, en el año 4500 a C. 
De su unión nació una prole de hijos que poblaron el mundo y de los que Caín y Abel son los mas conocidos y paradigma del enfrentamiento fraternal. 


 La expulsión del Paraíso y la lucha de Caín y Abel. Santa María la Real. Portada meridional. Sangüesa


El mito de la creación bíblica, como tantos otros contenidos del Antiguo Testamento, es una trasposición de un relato sumerio, en este caso, el poema de "Enki y Ninhursag" -recuerden que Abraham, el patriarca de los judíos, había nacido en Mesopotamia, en la ciudad de Ur-,  que narra , entre otras cosas, como el dios Enki, sufría de 8 males y  la diosa Ninhursag, por ayudarle a aliviarlos, dió a luz 8 diosas, con el propósito de que cada una curara uno de aquellos. 
 Ninhursag, , hija de Anu, la Madre de los Dioses-generación nacida en la Tierra, junto a Enlil,Utu, Enki e Isumud. Primera generación de los principales dioses de la Tierra.

El dolor de Enki en una costilla (Ti en sumerio) fue aliviado por su hija Nin ti (mujer de la costilla) que significa también" mujer que da la vida". Fue esta la que acabaría convertida en la Eva (la que da la vida en hebreo) que salió de la costilla de Adán, cerrando así el círculo de las creencias tradicionales de oriente.

El Génesis sostiene  (versículo 27, cap 1 hasta el vers. 2 del cap. 5) que Eva fue creada por Dios en el Edén como ayuda idónea de Adán, a partir de una costilla de éste y a ambos se encomendó la tarea de multiplicarse, llenar la Tierra y gobernarla (Génesis 1:28). Se relata que también les mandó comer de todos los árboles del huerto, excepto del árbol la ciencia del bien y del mal que se hallaba junto al árbol de la vida. Eva fue engañada por la serpiente, y vio "que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos y codiciable para alcanzar la sabiduría", por lo que comió del fruto prohibido y se lo dió a comer a Adán. La desobediencia de Eva dió lugar a que Dios los expulsara del Edén y sentenciara: " Aumentaré tus dolores cuando tengas hijos, y con dolor los darás a luz. Pero tu deseo te llevará a tu marido, y él tendrá autoridad sobre ti "(Génesis 3:16), que Adán debería trabajar para comer (Génesis 3:19) y que ambos morirían.



Adán y Eva con la serpiente, en el Edén. Catacumbas paleocristianas de Priscila, situadas junto a la Vía Salaria (Roma)


"Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los
árboles del huerto podemos comer;
pero del fruto del árbol que esta en medio del huerto dijo
Dios: No comeréis de el, ni le tocareis, para que no muráis.
Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;
sino que sabe Dios que el día que comáis de el, serán
abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el
bien y el mal.
Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era
agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría;
y tomo de su fruto, y comió; y dio también a
su marido, el cual comió así como ella.
Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que
estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera,
y se hicieron delantales".



De nuevo la expulsión del Paraíso tiene una relación directa con el mito de Enki, quien al descubrir un comportamiento inadecuado entre los humanos, los echó del Paraíso de las creencias sumerias.




Pequeña bóveda de la Creación. Adán y Eva arrodillados antes Dios, en majestad, en el Edén, con la serpiente.
Atrio de San Marcos. Venecia


La representación histórica de la Creación Bíblica es notable y antigua, pues ya desde época paleocristiana es constante en los centros litúrgicos para conocimiento de los creyentes, evidenciando así la explicación del origen humano sobre la Tierra y  de las desgracias, la culpa y la muerte.
Estos relatos de la creación surgen en contextos sociales patriarcales que otorgan a Eva, la dadora de la vida, un papel secundario respecto del varón, a quien debe someterse, al que se añade el de pecadora primigenia, en tanto en cuanto se revela, desobedece y quiere saber, creando un precedente insoslayable en el concepto que sobre la femineidad y pecado o virtud se va a a tener de la mujer a lo largo de milenios.


Adán y Eva. Beato del Escorial, s. X.
 Biblioteca del Monasterio, Cod. & II. 5




Pinturas románicas de la Vera Cruz Maderuelo, Segovia. Mediados/finales del siglo XII.
Museo del Prado, Madrid.

La condena a estar supeditada al del hombre, ya sea esposo, padre, hermano, hijos, etc afecta de forma implacable a la mayoría de las mujeres y, con excepciones notables y honrosas, convence a lo largo del tiempo de su necesario sometimiento e ignorancia.
Contra toda lógica, el génesis bíblico, arrancó el papel protagonista a la madre en la creación humana.


Creación de Eva de la costilla de Adán según el Génesis.
Manuscrito iluminado medieval, s. XV





Eva creada de la costilla de Adán. Biblia de Anjou, siglo XIV. Facultad de Teología Maurits Sabbe de Lovaina



Adán y Eva. Alberto Durero


¡Feliz Semana!



martes, 14 de abril de 2015

Cármina Burana: Una visión desde dentro





Pocas veces tiene una la suerte de formar parte de un espectáculo en el que la música, el canto y la imagen son tan impresionantes, tan potentes y excitantes. Este enorme y precioso regalo llega cuando menos se espera de la mano de autores, directores e intérpretes de primera línea. 
¡Te encuentras, de pronto en el medio del Cármina Burana!.
Nada mas lejos de estas líneas que intentar hablar de la obra, de la explosiva y carnal presentación del Cármina de la Fura del Baus, ni hacer un profundo análisis de la cantata de Carl Orff; gente mucho mas autorizada y con mejor criterio lo ha hecho y lo hará. 
Estas son solo unas líneas que intentan plasmar un proceso personal y coral de emociones, imágenes y música.
Ya en una ocasión me explayé con los Cármina Burana medievales y los goliardos (pincha aquí para verlo); siempre me ha parecido muy atractivo y sugerente este fenómeno tan humano de la rebeldía, la vitalidad y la irreverencia, esa mezcla de cultura con talante fatalista y a la vez brillante e irónico que se plasma en el compendio de los poemas del monasterio benedictino de Beuern. 
Se dice que la obra de Orf en forma de cantata con 24 de aquellos cármina medievales no es un obra importante desde el punto de vista musical ni armónico. Carezco de criterio para afirmar o desmentir nada al respecto. Sin embargo que el músico muniqués se decidiera a componer sobre aquellos textos maravillosos mezclando "canciones seculares para cantantes y coros para ser cantadas con instrumentos e imágenes mágicas" me parece sencillamente un acierto y adivino en ello una intención divulgativa inusual hasta entonces.
Que además esta cantata, al menos el ¡Oh Fortuna!, sea una de las obras musicales contemporáneas mas conocidas, ya sea por la Banda sonora de Excalibur, ya por la cabecera del programa "en portada" de RTVE, o por que ha llegado un momento en el que se utiliza para casi cualquier puesta en escena impactante, no hace si no ser un mérito mas de su increíble fuerza sonora.


A eso se le añade una puesta en escena, la de Carles Pradissa, de la Fura del Baus, que el mismo define como "trepidante, donde el espectador, a través de impactantes escenas, efectos especiales e incluso fragancias primaverales, se sumerge en la contundente y visceral música de Carl Orff"... Desde La Fura dels Baus hemos creado un espectáculo con fuertes imágenes escénicas, con la intención de ilustrar e iluminar toda la fuerza y poesía de unos textos, que a pesar de tener más de 800 años, hablan de deseos que nos vuelven a unir a lo más ancestral de nuestra especie… el círculo se cierra para seguir rodando."

La noticia, hace unos meses, de una posible representación de esta obra, en el Auditorio Miguel Delibes de Valladolid, junto con la propuesta de colaboración de cantantes aficionados llegó de la mano de Jordi Casas, director y artista en residencia del Centro Cultural Miguel Delibes de Valladolid. No había que pensarlo mucho por que, a todas luces, era una oportunidad maravillosa, así que comenzaron los ensayos individuales del "Floret Silva" para la selección del coro de escena. Una vez realizada esta se iniciaba un camino de ilusión, responsabilidad y compromiso con el espectáculo, un trabajo constante y satisfactorio nos ha permitido empastar 90 voces en escena. 
Primero solo con ensayos a piano bajo la magnífica dirección de J. Casas y el acompañamiento de Irene Alfageme  ¡qué suerte tan enorme! Son dos personas en las que se aúna una valía artística incuestionable, una enorme paciencia y un sentido del humor excelente. 


Sala de los primeros ensayos 



Ensayo en el Auditorio con Irene Alfageme al piano y bajo la dirección de Jordi Casas que ha conseguido que empastemos, acentuemos y pronunciemos un latín a la germánica y un alemán antiguo casi impecables. Fot. Raquel Asensio

Días después comenzaron los ensayos con el maestro Josep Vicent, y con Zamira Pascerí, directora de escena de la compañía, quien nos enseñó a movernos con orden, silencio y sincronización en un escenario desproporcionado para la complejidad del espectáculo y el número de cantantes, músicos y actores.


Primer ensayo con la presencia de Josep Vicent. Fot. José Luis Fernández.

Las contraltos y sopranos ejecutábamos de forma puntual en una danza de aromas, brisa y besos, mientras tenores y bajos aprendían a moverse por una taberna, sin gran dificultad.


Zamira Pascerí dirigiendo el ensayo de los chicos en la taberna. Jordi Casas, en el centro.

Poco puedo abundar sobre la calidad impagable de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León y los maravillosos Toni Marsol, barítono, Beatriz Díaz, soprano, Vasily Koroshev, contratenor y la actriz Luca Espinosa.
Un bello papel tuvieron las solistinas, alumnas de la Escuela Superior de Arte Dramático de Valladolid que colaboran en la puesta en escena.
Un coro tutti, compuesto por mas de un centenar de coralistas sirve de apoyo puntual haciendo que los números inicial y final, Oh Fortuna, truenen como el mismo Dios.
Todo un cuerpo de técnicos del Auditorio y la compañía cierran el enorme círculo de este Cármina Burana furero.
Casi sin percatarse se encuentra una cantando a cualquier hora uno de los poemas, incluso días después, recreándose en compases e imágenes.
Canto, música, maestros, trabajo actoral, voces maravillosas, emoción, convivencia, aprendizaje, empaste, vestuario y maquillaje....en fin, la experiencia ha sido un regalo musical y humano del que es casi imposible disfrutar mas. 



Vestuario y maquillaje. Fot. Mónica Supiot.




Preparadas para salir. Con mis compañeras y amigas Merche Jiménez y Mónica Supiot.
 Fot. Jaquot Supiot.



Maquillaje. Fot. Mónica Supiot


Indicaciones antes de salir a escena. Fot. Raul Llamazares





Goliardos de Harmonía. Fot. Raquel Asensio


Harmonía féminas, parcial. Fot. Raquel Asensio




Formación de sopranos y contraltos en el ensayo general del día 9 de abril. Fot. Jesús Guerra



Ensayo general desde dentro. Orquesta, cantantes, gruistas y barítono. Fot. Raquel Asensio.


Ensayo general. Fot. José Luis Fernández


Ensayo general. Danza. Fot. José Luis Fernández



Ensayo General. Fot. Raquel Asensio



Ensayo General. Goliardos con Toni Marsol vistos desde el fondo de la escena.
 Fot. Raquel Asensio



Ensayo general. Tenores y Bajos.




Ensayo General. Contraltos y sopranos.





"Sobre el escenario, un cilindro de diez metros de diámetro envuelve literalmente la orquesta, mientras los cantantes y las imágenes proyectadas sobre él, ilustran la obra de principio a fin. Una luna gigante, el deshielo, cascadas, éxtasis floral, una vendimia en directo, vino, agua y fuego"


La Fura dels Baus
























¡Fin!
 Fot. Nacho Carretero para el Auditorio Miguel Delibes


Gracias a Jordi Casas por su confianza, a mis compañeros, directores, participantes y fotógrafos, en especial a Jesús Guerra quien ha puesto a mi disposición algunas de sus fotografías aún inéditas. 




Un privilegio, una suerte, una gran emoción.




¡Feliz semana!





Coro de Escena

Sopranos


Alicia Agúndez, Begoña Alejo, Rosa Andrés, Leticia Arranz, Guadalupe Coello, Marta Conill, Cristina de la Rosa, María Eugenia Díaz-Emparanza, Alicia Fernández, Ana María Flores, Marta García, Balbi González, Marta Magro, Paloma Melero, Ana Navarro,  Felicidad Ronda, Inmaculada Sánchez, Carolina Ruiz, Esther Ruiz, Isabel Sánchez, Raquel Sarabia, Mónica Varela, Isis Olga Zapico.

Contraltos

Belén Blanco, Miryam Cartujo, Manuela del Caño, Consuelo Escribano, Laura Esteban, Cristina Fernández, Victoria García, Carmen González, Arantxa Jaén, Mercedes Jiménez, Josefina Lavín, Amparo Lorenzo, Ana Mª Moral, Iris Elena Muñoz, María Aurora Núñez, Arantxa  Pérez, Mª Cristina Simón, Beatriz Soria, Ana Mª Soria, Mónica Supiot, Isabel Vallinoto, Yolanda valpuesta, Rosario Velicia.


Tenores

Ricardo Allende, Alejandro Arenillas, César Arévalo, Juan jesús Barrientos, Jorge Caballero, Rubén Carreño, Miguel Angel Cerezal, Jorge Colino, Pablo Conde, Juanjo Conde, Albert Folch, José de la Fuente, Alejandro García, Iñigo Igualador, Alejandro López, Carlos J. Méndez, Ramiro Leal, Antonio redondo, Pablo Román, Carlos Silva, Antonio Toral, Borja Velázquez


Barítonos /Bajos

Valentín Benavides, Fausto Benito, Pablo Corbí, José Manuel Díez, Ismael Escudero, Joaquín Fernández, Jesús Garrote, Carlos Gutiérrez, Fernando Jiménez, Raúl Llamazares, Alfonso Martín, César Méndez, Daniel Morales, Gregorio Múñoz, Luis Pardo, Marc Pujol, Álvaro Romo, Fernando Sangrador, José Ramón Sanz, Raúl Salcedo, Miguel Sánchez, José Ignacio Sánchez, Fernando Sangrador, José Ramón Sánchez.


Coros

Coro Pícolo, Coro Universidad de Valladolid, Coral Valparaiso, Coral Támbara, Coro Discantus, Coral Villa de Iscar, Alauda, Audi Nos, Harmonía, Alterum Cor, Capilla Clásica, Vox Vitae, Bella Desconocida.


Dirección

Jordi Casas