Representación del Sol y la Luna en el Beato de San Miguel de Escalada, fol. 112. Biblioteca Pierpont Morgan, Nueva York
Esta noche ha entrado el verano, el nuevo verano del año 2016, en el hemisferio norte, donde yo vivo. A partir de hoy los días se irán haciendo paulatinamente mas cortos en favor de noches mas largas, se celebrarán las fiestas de San Juan, en las que el fuego protagoniza fiestas nocturnas desde tiempos inmemoriales en todos los rincones del mundo.
San Juan remite a la introducción del cristianismo de una nueva fiesta religiosa que conmemora el nacimiento del Bautista, seis meses antes del de Cristo, ambos mas o menos coincidentes con los solsticios de verano e invierno y, por ello, asociados a fiestas preexistentes de las que aún quedan reminiscencias ancestrales.La tradición bíblica cuenta que Zacarías recibió en sueños al arcángel Gabriel quien le notifico que iba a tener un hijo, pero el no lo creyó porque su mujer Isabel, era estéril: En castigo Zacarías quedo mudo, hasta el nacimiento de su hijo Juan que seria después el llamado Bautista. En agradecimiento, repartió por el pueblo hogueras de fuego que el mismo saltaba por encima de las llamas mientras recitaba cánticos de bendición al altísimo y anunciaba el nacimiento de su hijo
En Grecia este día, y coincidiendo con el solsticio de verano, se dedicaba al dios Apolo. Los griegos encendían grandes hogueras de carácter purificador. Los romanos, por su parte, dedicaron a la diosa de la guerra Minerva unas fiestas con fuegos y tenían la costumbre de saltar tres veces sobre las llamas. Ya entonces se atribuían propiedades medicinales a las hierbas recogidas en aquellos días.
Tapiz de la Creación. Catedral de Gerona
Esta tradición se ha continuado a través de los siglos, como si fuera una pauta indestructible. Veintiún siglos después realizamos en las mismas fechas durante esa noche, todo tipo de rituales relacionados con el fuego purificador que destruye el mal prolongando la vida y concediendo la prosperidad. En esta noche, la luz reina sobre las tinieblas, y desde todos los rincones del planeta se encienden hogueras en las calles, la gente baila y salta por encima del fuego donde se quema todo lo dañino y perjudicial con la esperanza y el sueño de un mañana mejor .
Una vez mas se observan comportamientos idénticos por todo el mundo con el mismo objetivo.
En México, los guerreros aztecas estaban dedicados al sol y cooperaban con el en la “renovación de los fuegos”. Durante el imperio de los Incas del Perú se festejaba, el Inti-Raymi (o la fiesta del Sol) en la impresionante explanada de Sacsahuamán, muy cerca de Cuzco. Justo en el momento de la salida del astro rey, el inca elevaba los brazos y exclamaba: “¡Oh, mi Sol! ¡Oh, mi Sol! Envíanos tu calor, que el frío desaparezca. ¡Oh, mi Sol!”, según cuentan B. Ortega y A. Solares.
Siguiendo con la trayectoria global para los indues Indra es el fuego primordial y es adorado de la misma forma y en las mismas fechas. Las cenizas se conservaran por todo un año y algunos de sus habitantes pueden leer el futuro mediante la formas de las llamas de las hogueras.
Paso del fuego en Corrientes
En mi tierra,como en buena parte de la Europa mediterránea, los rituales antiguos comenzaban con la limpieza de las casas quemando todo lo inservible y deteriorado. La ropa se exponía al relente de la noche, se lavaban en el arroyo e incluso se llevaban a cabo trucos adivinatorios con huevos. Me contaban mis mayores que en la noche de San Juan ,a las doce se echaba un huevo en medio vaso de agua y se revisaba doce horas después analizando la figura que saliera se podía saber el futuro.
En otros lugares era costumbre entrar en el río o en el mar para purificarse de todas sus faltas y después daban tres vueltas en sentido contrario a las agujas del reloj alrededor de la hoguera para “deshacer el mal” mientras se cantaba y tañían instrumentos.
Esta noche pasado el solsticio se ha producido año exactamente a las 0:34, coincidiendo, tras 70 años, con una noche de Luna llena.
Hoy celebramos también el día de la música.
Muy feliz verano!
El blog se despide hasta septiembre.
Buena entrada, me ha agradado mucho. Te comparto.
ResponderEliminarGracias Suni.
EliminarPara mi, la noche anterior a San Juan esta revestida de gratos recuerdos de infancia, de la ilusión con la que elevábamos enormes hogueras al cielo entre gritos de alegría y bailes, mientras esperábamos a que se consumiera para saltar por encima; del modo en que adornábamos las fuentes del pueblo de mis abuelos a la mañana siguiente por ser el día de San Juan...
ResponderEliminarRecuerdo que se decía que el día de San Juan bailaba el sol, y había costumbre de lavarse en el río o de pasear descalzo en los prados cargados de rocío en la mañana de San Juan para curar enfermedades cutáneas.
La noche de San Juan parte el año en dos, y sólo se encuentra algo parecido -y a la vez absolutamente opuesto- en la del 31 de diciembre.
Cómo te entiendo!
EliminarEn Segovia se dice de esa noche que el sol sale dando vueltas y es costumbre esperar el amanecer en la ermita de Juarrillos
ResponderEliminarEn Segovia se dice de esa noche que el sol sale dando vueltas y es costumbre esperar el amanecer en la ermita de Juarrillos
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